39 Festival del Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana
Hace 25 años asistí al Festival de cine de la Habana, un periodo difícil para el país, el llamado periodo especial, y consecuentemente para el Festival. Al volver he comprobado que aunque el país está algo mejor las cosas no han cambiado tanto.
El amor del espectador cubano al cine de su país es algo que solo se puede comprender si se ve en directo. Las colas que se producen a la entrada de los cines para ver películas cubanas son inimaginables, mas de 2 kilómetros y colas de 5 o 6 horas.
El Festival presentó este año dos films que aunque de calidad discutible arrancaron los aplausos de una platea a rebosar: Los buenos demonios de Gerardo Chijona navega entre la comedia y la tragedia sin decantarse por ninguno de los dos géneros y, a pesar de la risa de los espectadores, es bastante floja en todos sus aspectos. El otro film cubano, premio del público en el festival Sergio & Serguei narra la relación de un radioaficionado cubano con el último cosmonauta soviético en órbita, con bastantes chistes respecto a la situación actual de los habitantes de Cuba.
Naturalmente, pudimos ver otras proyecciones latinoamericanas de más calidad pero también con más medios para realizarlas. Películas argentinas con producción de países europeos, como La cordillera de Santiago Mitre, con Ricardo Darín en papel protagonista y una excelente fotografía de Javier Sebastian Ariaux. En ella, Darín recrea la vida de un presidente que debe tomar decisiones que no solo afectan al país sino a su propia vida personal y a las relaciones con su familia.
Alanis, premio coral al mejor largometraje de ficción y a la mejor actriz Sofia Gala. Alanis es una prostituta con un niño pequeño que se encuentra sin casa de repente y ha de buscar ayuda para seguir adelante intentando a pesar de su profesión recuperar la dignidad. Película dura con escenas de sexo desagradables a la vista en algunos momentos pero de una gran fuerza interpretativa.
Invisible de Pablo Giorgelli , donde vemos la soledad y la rutina de una chica de 17 años embarazada con miedo a enfrentarse a la decisión que debe tomar. Este film obtuvo el premio al mejor guión.
Una especie de Familia de Diego Lerman. Aquí vemos las vicisitudes de una doctora de clase media interpretada por Bárbara Lennie, para conseguir a un hijo en adopción y para finalizar Argentina trae la última película de Lucrecia Martel Zama, que narra el recorrido de un funcionario de la corona española que espera la carta del rey para volver a casa, carta que nunca llega, lo que hace que se vea obligado a aceptar cualquier tarea ordenada por sus superiores. Fue premiada como mejor sonido.
La inauguración de esta edición del Festival fue para el film brasileño O filme da minha vida de Selton Mello, la historia de un chico abandonado de pequeño por su padre, amante del cine, y que al conocer la verdad sobre su progenitor le hace dar otro sentido a su vida. Brasil demostró que tiene un cine vivo con Aos teus olhos basado en la obra de teatro El principi d’Arquimedes, de Josep Maria Miró, y en la demuestra que una acusación cuando se viraliza en las redes sociales, comienzan los juicios precipitados sobre algunas acciones que quizá no son reales. Una cinta a recomendar encarecidamente. Otras películas brasileñas: Praça Paris de Lucia Murat, en la que vemos la relación entre dos mujeres una psicoanalista portuguesa y la mujer a la que atiende con problemas de violencia doméstica. Vazante de Daniela Thomas, aquí la esclavitud y el casamiento de un hombre mayor con una niña de 12 años nos llevan al Brasil de 1821. Joaquim de Marcelo Gómes , situada en el Brasil del siglo XVIII, e inspirada en la vida de Tiradientes , el primer líder del movimiento revolucionario brasileño.
De Chile, Una mujer fantástica de Sebastian Leilo, vista ya en diversos festivales pero que sigue sorprendiendo sobre todo por su protagonista, Daniela Vega, que interpreta a Marina, una mujer que tras la muerte de su pareja debe enfrentarse a una sociedad que no la acepta. De este país pudimos ver también Los Perros, una película en la que el romance, y el amor fraternal se ven envueltos en el abuso de los derechos humanos durante la dictadura de Pinochet.
Mexico trajo tres producciones al Festival. Dos de ellas, Las hijas de Abril de Michel Franco. y Restos de Viento de Jimena Montemayor, tienen como eje central la relación de una madre con sus hijos. La primera es con dos hijas , una de ellas adolescente y embarazada en que al aparecer una madre ausente durante mucho tiempo les creará gran cantidad de problemas, la segunda es la historia de una madre con dos hijos pequeños a los que prácticamente no atiende y está a la espera de un marido que nunca llega. Tesoros de Maria Novaro es la otra película mexicana, una joyita, en la que un grupo de niños buscan el tesoro que el Pirata Francis Drake escondió cuatro siglos atrás.
Para terminar, por Colombia, Siete cabezas de Jaime Osorio, donde el Apocalipsis de la Biblia sobre el monstruo de las 7 cabezas se hace realidad, y Carpinteros de Jose Maria Cabral representando a Republica Dominicana, en la que un preso se comunica con una joven de la cárcel vecina con un lenguaje de signos inventado por ambos. El protagonista, Jean Jan, se llevó el premio a mejor actor .
La sección oficial de esta edición se ha caracterizado por personajes femeninos muy duros, con muy buenas interpretaciones y con una parte muy importante de films dirigidos por mujeres.
© Margarita Chapatte